martes, 5 de agosto de 2014

CREMA DE MELÓN

La crema de melón es un recurso ideal en verano, que nos ayudará a combatir el calor.



Tiene muy pocas calorías (ya que os dejo la versión light) y contiene mucha agua, por lo que nos ayudará a la eliminación de líquidos.

Podéis tomarla de primer plato tanto en la comida como en la cena:

Ingredientes (2 raciones):
  • 1/2 melón maduro.
  • 100 gr. jamón serrano curado en lonchas finas.
  • 1 cucharada de queso batido desnatado 0% materia grasa.
  • Unas gotas de vinagre de módena (opcional).
  • Sal

Preparación:
Pelar y cortar en trozos el melón. Echar en el vaso de la batidora. Añadir sal y una-dos cucharadas de queso batido desnatado 0% materia grasa y batir bien.
Picar las lonchas de jamón curado en taquitos finos.
Servir la crema de melón en un bol y echar encima el jamón picado y unas gotas de vinagre de módena (opcional).

lunes, 4 de agosto de 2014

¿Nutren igual las verduras frescas que las procesadas?

Hoy en día podemos comer la fruta y verdura que queramos en cualquier época del año sin importar si son de temporada o no, ya que además, los sistemas de procesado permiten que nuestra economía tampoco sufra por ello.


Pero, ¿contienen la misma cantidad de nutrientes las verduras congeladas o envasadas?

Evidentemente, las propiedades organolépticas (olor, sabor, color, etc...) de estos alimentos, se pierden, y muchas personas no están dispuestas a comer verduras que no sean frescas. Pero además, las verduras, hortalizas y frutas empiezan a perder nutrientes desde el mismo momentos que son cosechadas. En el caso de las frutas y verduras ricas en vitamina C, llegan a perder hasta casi la mitad de esta vitamina al cabo de un día o dos y los productos envasados y congelados también tienen sus propios beneficios, que tampoco debemos desechar.

En el caso de las verduras y frutas frescas, el tiempo que tardan desde su recolección a nuestro plato es crucial para que mantengan todas sus propiedades nutricionales. ¿Imaginaís cuánto tiempo tardarán en llegar a nuestro supermercado las naranjas chinas o las bananas, o el mango...productos que ni siquiera se cosechan en nuestro país?. A ésto hay que añadir, el tiempo que se encuentran almacenadas en refrigeración tanto en la cámara figrorífica del supermercado, como en la nevera de nuestra casa. Es evidente que la pérdida de nutrientes es importante.

Algo que podemos hacer para evitarlo es comprar las frutas y verduras de temporada, a poder ser del país o incluso de nuestra comarca, y no hacer compras con demasiada antelación en lo que se refiere a estos productos; de manera que una fruta o una verdura, no esté más de 2 ó 3 días en nuestra nevera. Algo casi imposible con el ritmo de vida que llevamos.

En cuanto a los vegetales procesados, se congelan o envasan nada más ser recolectados, para ofrecer mayor comodidad y seguridad, pero también, para que la pérdida de vitaminas y minerales se paralice hasta el momento que descongelamos o abrimos el producto.

También es cierto que en el caso de los alimentos congelados, se hierven en agua unos minutos, antes de congelarlos, de manera que se reduce en parte el contenido de las vitaminas hidrosolubles, especialmente la B1 y la C.


En cuanto a los alimentos envasados, son los que tienen mayor duración. Son tratados con calor para su conservación, de manera que podemos compararlos con los que cocemos en nuestras casas en cuanto a su valor nutricional.

Podemos concretar entonces que aunque hay una pérdida inicial de nutrientes, durante el período de almacenamiento, hay una pérdida menor con respecto a los vegetales frescos, incluso en algunos casos, como el licopeno de los tomates, que es un antioxidante muy potente, se encuentra en mucha mayor cantidad en los tomates envasados que en los frescos.
Los minerales y la fibra también permanecerán estables.



El problema está que en el caso de los alimentos envasados, es más problemático lo que se les añade, que lo que pierden, ya que para su conservación se utiliza mucha sal, conservantes y colorantes.

En cualquier caso, como siempre, en la variedad está el equilibrio, y las directrices de alimentación en toda Europa recomiendan incluir todo tipo de vegetales, frescos, congelados y envasados para comer los suficientes.